¿Por qué Chile destaca en los juegos de pelea?

Hay múltiples representantes nacionales que han realizado proezas en los juegos de lucha desde hace varios Las oportunidades que ha tenido LATAM para participar en competencias internacionales de fighting games suelen ser escasas, con desempeños generalmente regulares. Sin embargo, hay múltiples representantes nacionales que han logrado grandes proezas en los juegos de lucha desde hace varios años, rivalizando con verdaderas potencias mundiales. En sagas como Street Fighter, Super Smash Bros., Marvel vs. Capcom, Mortal Kombat, entre otras, Chile se ha consolidado como una región fuerte en este género, ganándose el respeto de las escenas extranjeras.

Estados Unidos, México, Japón, Corea del Sur y China son los países que históricamente han dominado la escena competitiva de los fighting games, como Street Fighter, Tekken, King of Fighters, Mortal Kombat, Super Smash Bros., entre otros. Esta supremacía se ha determinado por la constante dominancia de sus jugadores en torneos importantes, es decir, aquellos que cuentan con una gran cantidad de participantes, tanto locales como internacionales.
Este tipo de instancias suele realizarse en suelo norteamericano, asiático o europeo, por lo que la representación sudamericana es, en general, escasa. Además, en la mayoría de los casos se ha evidenciado una brecha de nivel en comparación con esas regiones, siendo normalmente superados con amplia diferencia. Aun así, en ocasiones, algún jugador del Cono Sur logra sorprender o “dar cara”.

El nivel de Chile

En ese sentido, Chile es la excepción a la regla. El país comenzó a ser reconocido como una escena con potencial competitivo cuando algunos representantes nacionales empezaron a ganar torneos de máximo calibre.
Uno de ellos fue Nicolás González, alias Kane Blueriver, quien ganó el EVO 2015 en Ultimate Marvel vs. Capcom 3, convirtiéndose en el primer chileno y latinoamericano en ser campeón del evento de fighting games más prestigioso del mundo.

Otro ejemplo es Gonzalo Barrios, alias ZeRo, quien también campeonó en el EVO 2015, pero en Super Smash Bros. para Wii U. Por si fuera poco, obtuvo el Récord Guinness por “el triunfo más extenso en un torneo de videojuegos sin perder una ronda”, tras vencer a 1.926 jugadores. Desde entonces, prácticamente gobernó el juego.

Podía parecer que se trataba de casos aislados, pero, afortunadamente, no fue así. En los últimos años han surgido más jugadores chilenos que se han sumado al historial de proezas en campeonatos internacionales:

  • Los hermanos Martínez, ScorpionProcs y Nicolas, quedaron en el podio del CEO 2021 y el EVO 2022 de Mortal Kombat 11.
  • Derek Blaz, con solo 14 años, fue subcampeón en la Capcom Cup 11 de Street Fighter 6.
  • Jaime Díaz, alias Craime, de la misma edad y competidor del mismo juego, en el CEO 2025 derrotó a Daigo Umehara, considerado uno de los mejores jugadores de juegos de pelea de todos los tiempos.
  • En Super Smash Bros. Ultimate destaca Toon, quien ha brillado cada vez que compite en Estados Unidos, pasando rápidamente de estar entre los 500 mejores jugadores del mundo a ocupar el puesto #24 en solo unos meses, tras derrotar a múltiples competidores de talla mundial.

Factores

Hay varios factores que explican este fenómeno.
Primero, la cultura geek “caló hondo” en Chile. Oriel Rodríguez, traductor y académico del Departamento de Lingüística y Literatura de la Usach, señaló que el fenómeno del anime se viene gestando “desde fines de los 70’, hasta que hoy en día creo que tenemos prácticamente tres o cuatro generaciones que ya han consumido anime como si fuera algo muy normal”.
¿Qué relación guarda la animación japonesa con los videojuegos? Rompe el estigma de que su consumo es solo para niños. La temprana exposición a la cultura geek pudo haber ayudado a abrir el camino hacia una mayor aceptación y desarrollo de los videojuegos.

Segundo, Chile fue uno de los primeros países de LATAM en acceder masivamente a internet de banda ancha, desde fines de los 90 y comienzos de los 2000. Durante largo tiempo, lideró el ranking de la mayor cantidad de personas con computadores en el continente. Esto contribuyó a una temprana alfabetización digital: los jóvenes aprendieron a usar emuladores, configurar juegos y modificar archivos, lo que se tradujo en una mayor cercanía con todo tipo de videojuegos. Además, el acceso a la red permitió que se formaran comunidades de videojuegos de manera temprana, tanto presenciales como en línea.

Tercero, la movilización de los propios chilenos para construir y hacer crecer la escena de los fighting games. Las primeras competencias organizadas en Chile se centraban principalmente en juegos de pelea. Sitios web como El Coliseo, creado a finales de los 90, reunían a los primeros grupos y comunidades para jugar partidas y anunciar eventos con premios.
El país llegó a tener torneos a escala universitaria, aunque las instancias especiales para gamers eran escasas y rara vez se repetían. Todo cambió gracias a Germán Rojas, actual jefe de New Game Store, quien logró traer la World Cyber Games entre 2009 y 2010, y ayudó a producir la Liga Samsung. En dichos eventos se reunían entre 20 y 25 mil personas: un hito histórico para el gaming chileno.

De la pasión al profesionalismo

Sin embargo, la semilla del nivel actual de la escena chilena se sembró gracias a dos jóvenes que participaron en el EVO 2011. La experiencia los inspiró tanto que quisieron darle la misma oportunidad a otros compatriotas. Así nació VGM TEC, competencia nacional cuya primera edición se realizó a comienzos de 2012 en Antofagasta.
Los ganadores de Street Fighter IV Arcade Edition, Ultimate Marvel vs. Capcom 3 y Mortal Kombat 9 obtendrían como premio un viaje al EVO 2012. Uno de los beneficiados fue el mencionado Kane Blueriver.

Tan solo la experiencia de dos personas se tradujo en un ímpetu competitivo que no ha dejado de crecer. Aquí entra en juego el cuarto y más importante factor: la pasión del chileno.
Esa misma pasión se refleja en la hinchada futbolera, como cuando el canto del himno nacional hizo temblar el Estadio Maracaná antes del partido entre Chile y España en el Mundial de 2014. Incluso Iron Maiden ha declarado que disfruta tocar en Chile por el “amor y la energía” de sus fanáticos.

Esta actitud se traduce en un compromiso extremo a la hora de competir o de organizar eventos. Un caso reciente es el de Pablo Acevedo, alias HB2, quien gastó los ahorros de su vida para financiar un torneo nacional de Super Smash Bros. Ultimate en octubre de 2025, llamado Mistery Gift, con la intención de hacerle un “regalo” a la comunidad con la que creció.
En este evento invitó a destacados jugadores sudamericanos y al top mundial mexicano Chag, de quien se esperaba al menos una aparición en la final. Sin embargo —y para sorpresa de nadie a estas alturas—, el mexicano terminó en el puesto #33. Por si fuera poco, el Top 8 estuvo conformado únicamente por chilenos, con Toon a la cabeza.

¿Acaso los jugadores extranjeros decepcionaron? Para nada.
Es simplemente que Chile se consolidó como uno de los máximos exponentes de los fighting games.

Carlos Maldonado

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