Los días se acortan, las mañanas son más frías y salir de casa sin abrigo ya no es una opción. Con estas señales llega una de las temporadas más esperadas del año: el invierno. Y con él, nuevas tendencias. Este 2025, la moda invernal se mueve entre el lujo silencioso, la sostenibilidad y un regreso audaz a las siluetas con volumen. Consultamos a la asesora de imagen y cosmética Dio Torra sobre todo lo que reinará en esta temporada.
Este Invierno se construye a partir de múltiples influencias. Por un lado, domina el «quiet luxury», esa elegancia silenciosa popularizada por series como Succession, donde la sofisticación se mide en la calidad y no en el exceso. Al mismo tiempo, vuelve el grunge de los 90, pero con una vuelta de tuerca: cuero, cuadros y superposiciones, ahora en versiones depuradas y con tejidos de alta gama.
El romanticismo gótico también gana terreno, con encajes oscuros, terciopelo y transparencias que insinúan más que muestran. La estética nórdica, con su minimalismo cálido y funcional, se mantiene como favorita en climas fríos. Como nos afirma Dio Torra, “la moda más potente nace del equilibrio entre contraste y coherencia” y “los códigos del lujo han cambiado: ahora la clave está en la sutileza”.
Vemos prendas en tonos ricos y envolventes Dio nos mencionó que los que estarán más a full serán “Los tonos ciruela profundo, rojo arcilla, gris lavanda, chocolate amargo, camel tostado y vino profundo lideran el invierno” También veremos cómo el azul petróleo y el verde oliva brumoso se imponen, aportando un toque de frescura y sofisticación. Los detalles en rojo ladrillo, mostaza envejecida y gris humo cálido se convierten en aliados perfectos para enriquecer cualquier conjunto, permitiendo mezclar texturas y capas con estilo.

La clave está en equilibrar el estilo con la funcionalidad. Los abrigos maxi tipo bata o cruzados, con cinturones y hombros bien definidos, se convierten en piezas clave. También regresan los blazers con hombreras marcadas, con un enfoque moderno.“La clave está en combinar volumen y estructura sin perder elegancia”, comenta Dio. Entre las prendas más vistas estarán las faldas midi de cuero y los pantalones slouchy, básicos del estilo urbano. Y para un guiño nostálgico, destacan las faldas escocesas y chalecos de punto, perfectos con botas altas o zapatillas robustas.
Esta temporada, los accesorios apuestan por el impacto más que por la cantidad. Los maxi cinturones marcan la cintura sobre abrigos oversize, y los guantes largos de cuero regresan como toque de lujo dramático. En bolsos mandan las formas geométricas, como triángulos y trapecios, con colores sólidos o texturas crocodilo. Las balaclavas de punto, además de abrigar, aportan un aire moderno y enigmático. Como dice Dio Torra, “un accesorio bien elegido habla más fuerte que un conjunto entero” y “la elegancia contemporánea no necesita adornos excesivos, sino gestos con intención”
Este invierno no se trata solo de seguir modas, sino de vestir con propósito. Elegir materiales sostenibles, priorizar el confort sin dejar de lado la creatividad. La moda 2025 es una declaración de estilo que entiende el contexto y abraza lo nostálgico.